El paro nacional que se inició hoy jueves 14 de junio en Nicaragua fue precedido por "horas de terror", y es que la iglesia Católica denunció que en la víspera del paro al menos cuatro personas murieron en la ciudad de Masatepe, a 48 kilómetros al sur de Managua, en un ataque de la Policía Nacional en combinación con fuerzas "parapoliciales".
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La denuncia fue hecha por el obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez.
Las protestas, que empezaron en abril pasado contra las reformas al Seguro Social, han producido al menos 154 muertes y tienen el fin de obligar al presidente Daniel Ortega a hablar de "democratización" en el diálogo nacional.